El salto cuántico de la Tierra: el tiempo 0 de la manifestación de la energía de síntesis: el colapso cósmico de la Ascensión de la Tierra, probable en 2024.

 

El 5 de enero de 1989 a e las 8:00 de la mañana (hora local de los Pyr.Or.66), fuimos testigos de lo que nos parecía la absorción de materia negra (¿antimateria?) por el sol en forma de tres franjas negras que bajaban de lo alto del sol hacia su ecuador. La posición cercana de los tres planetas mayores (Urano/Neptuno/Saturno) en Sagitario parecía reveladora para esto. Aparentemente estábamos frente a una ventana cósmica. Escribimos sobre ello en el blog de Pangeosis. Nadie nos ha hecho nunca comentarios al respecto.(http://pangeosis-es.blogspot.com/2008/07/los-cambios-y-la-nueva-astrologa-csmica.html).(Nota: En este periodo hemos tenido manifestaciones de apertura al mundo astral que nos han marcado profundamente).

 Con el tiempo hemos reconocido estos eventos como inspirados por la Inteligencia Unificadora del Espíritu Instructor del Mundo. En el marco del desarrollo de la ciencia de síntesis, Él nos impulsó a buscar un acercamiento de la astrología a la astronomía, lo que dio lugar a la ciencia de la astronomología.

Estábamos conscientes de que el espíritu de este desarrollo es estimulado por los cambios vibratorios de la tierra que piden abrirse a una mejor comprensión de las relaciones entre el mundo material (natural, científico, técnico...) y espiritual (como el mundo del potencial, de las profecías y de las informaciones para el desarrollar de la conciencia). Así nació la idea de la ciencia y trabajo de síntesis (poner todos los elementos conocidos en la coherencia de un conjunto evolutivo según su nivel de relaciones inteligentes) para obtener una comprensión más completa o holística del mejor sentido (o voluntad) del potencial del diseño de la evolución de la vida. Así que desarrollamos la nueva astronomología con la creación de un mapa del cielo, que se hizo evidente directamente con el evento del 5.01.1989, mencionado anteriormente. Debía indicar mejor el sentido de la evolución del sistema solar según el lugar del sol en la galaxia, así como el dinamismo de sus diferentes relaciones a varios niveles en este contexto.

Muchas veces tuvimos que corregir los resultados de nuestras investigaciones. Nos enseñaban las diferencias de vibración entre el mundo espiritual y las apariencias materiales y la dificultad de interpretarlas correctamente. Al volver a empezar y corregir sin descanso, nos vimos cada vez más obligados a buscar los puntos de aproximación en los que el espacio y el potencial de la evolución (tiempo de transición) podrían intercambiarse, es decir, el momento en que las tensiones del mundo manifestado (0,001%) se encuentran con el potencial de la armonía del mundo no manifestado (99,999%). Así es como (re)descubrimos también el significado de la flor de la vida, del Merkabah, del cuboctaedro, del toro y del potencial cuántico de sus implicaciones. Todo esto nos llevó a las investigaciones de Nassim Haramein. Al mismo tiempo, estábamos siendo proyectados en el proceso de la liberación de la memoria de la vida más allá de la muerte.

Encontrar la representación adecuada del sistema solar con la proyección proporcional de las órbitas planetarias en la bóveda celeste no era fácil, especialmente para los planetas mayores. La base astronomológica se imponía como una representación heliocéntrica del sistema solar. Al poner la luz en el centro, el entorno está mejor iluminado.

El plan 1 representa una proyección proporcional de las órbitas de los planetas inferiores (naranja/Mercurio; amarillo/Venus; azul/tierra y rojo/Marte) alrededor de la actual plaza "supuesta" del sol en su ciclo pleiadiano de 25.800 años. Debido a que la proyección proporcional de las órbitas de los planetas superiores no es posible, hemos optado por su proyección en el ecuador celeste ya que su papel parece ser principalmente el ajuste del sistema solar con su entorno galáctico. Hemos buscado una situación lo más realista posible con nuestros medios y conocimientos limitados. Así, pues, los errores son posibles.

 

Según nuestras investigaciones, desde el solsticio de verano de 2021, la humanidad se encuentre en un período que la lleva a la puerta de ruptura, ajuste y purificación cíclica de la tierra relativa a su entorno cósmico. Primero i hemos interpretado los siguientes tres años como los tres días de la oscuridad profetizada. Pero aparentemente es un período de preparación con una intensificación de excesos, tribulaciones e inconsistencias hasta el colapso concreto de estos 3 días profetizados. Por lo tanto, es un período de ruptura, de preparación y de selección hacia el paso por una especie de túnel (negro) que se anuncia según nuestra investigación para marzo de 2024 en la aurora de la primavera.

Llegamos entonces a la constatación de que la puerta del túnel de ascensión de la tierra se abriría, según las efemérides astronómicas, a partir de la nueva luna del 10 de marzo de 2024 y que el paso podría desarrollarse entre el 11 y el 13 de marzo de 2024. Debido a que se requieren condiciones específicas de coincidencias inteligentes, la elaboración astronomológica ha revelado la alta probabilidad de una situación transitoria concentrada y aparentemente excepcional debido al gran contraste u a la oposición et al aislamiento total entre la tierra y los demás elementos del sistema solar. En cualquier caso, para confirmarlo deberían intensificarse toda clase de señales intensas (entre otras, una sucesión de terremotos como una forma de taquicardia que recorrerá el planeta). Para verificar: http://ds.iris.edu/seismon/index.phtml. El aumento más rápido de lo esperado de la temperatura mundial,  es otra señal como elemento fuego purificador.

El plan 2 es un esquema simplificado del plan 1

 En concreto: hacia mediados de marzo de 2024, la tierra se encontraría cada vez más aislada en relación con los otros planetas y el sol, situación acentuada por la posición de la nueva luna. La Tierra estará en frente de los elementos que forman un gran triángulo de acumulación de fuerzas magnéticas  y gravitacionales. Sus fuerzas vectoriales (que se concentran en tres zonas encima del sol) parecen ser la porción cargada del triángulo encima del «X», la plaza del sol, que figura como el centro de los 2 triángulos (tetraedros) estirados del Merkabah (cuerpo de unión) del sistema solar. La tierra se encontraría en el lado opuesto de este punto, cerca de la parte superior del triángulo opuesto de un vacío relativo (//hara del cuerpo humano), creado por la ausencia de planetas de su lado. La tierra se encontrará en el lado opuesto bajo el punto X del sol en el triángulo inferior oscuro que forma un vacío relativo (//hara del cuerpo humano), creado por la ausencia de planetas de su lado. También se podría situar la tierra como cerca del centro entre dos toros que evocan la situación multidimensional de la representación sintetizada y proyectada de luz-oscuridad como en un espejo.  

Nota: Esta situación sol-tierra nos hace pensar en la relación y transición necesaria entre el plexo y el corazón en el ser humano para permitir su ascensión a la quinta dimensión

 

Los planes 1 y 2 se refieren a la situación general y el plan 3 a los detalles del centro X del Merkabah. Las posiciones de los planetas y algunos de sus alineamientos apretados son excepcionales en relación con el conjunto de los elementos de la bóveda celeste. Esta vez, los planetas menores (Mercurio, Venus y Marte) parecen desempeñar un papel decisivo de acentuación de las fuerzas de armonización de los planetas mayores en el movimiento de la entrada de las nuevas energías de la fuente cósmica (alfa - dirección Pléyades/Kali), su ascensión (dirección Pegase/Kalki) hacia el Gran Atractor (punto omega) y la relación con el centro (Sgr A) de la galaxia como se indica en el plan 1. El centro de la galaxia funcionaría como absorbente de las fuerzas convertidas en excedentes.

El Plan 3 extiende artificialmente la posición sol-tierra para iluminar más la situación.

La situación atraería, pues, una especie de vacío que evolucionaría según el movimiento de los planetas inferiores y de la luna, formando un túnel durante «teóricamente» tres días (movimiento de 3° con relación al sol).

Es posible que la Tierra quede fuera del control de las fuerzas lunares (// fuerzas emocionales humanas).

Las tensiones de la tierra podrían entonces equilibrarse libremente, provocando posiblemente un cambio en el eje magnético con la consecuencia probable también de un cambio en su eje de rotación. El Norte podría dar un vuelco mayor o incluso virar (cambio hacia el Este y el Sur, 149-150°. El polo sur podría encontrarse finalmente en -7° hacia el noroeste actual). El sol saldría la mañana por el oeste.

Si bien se pueden esperar cambios importantes, no somos catastróficos sabiendo que la tierra es vigilada y que la vida está relativamente bien protegida para los movimientos del eje gracias a sus atmósferas, como los astronautas en el espacio gracias a sus trajes. No obstante, algunas precauciones a tomar serían adecuadas (aviones, barcos, precaución en las zonas costeras...)

¿Y por qué el calentamiento y el cambio? Como jardinero, siempre escuchamos a la naturaleza y el diseño de su evolución, que parecía indicar que querían evolucionar hacia un clima más homogéneo de base subtropical, variable según los lugares. Esto facilitaría las relaciones entre los seres humanos (el desafío paradigmático del nuevo mundo). El fuego (calor) es un elemento básico para la purificación disminuyendo las resistencias de las tensiones en las manifestaciones.

Conclusión:

Así, pues, estamos cerca de un momento intenso en el que la tierra podría ajustarse, liberándose las tensiones acumuladas en su interior y l exterior de sus capas físicas, astrales, mentales y espirituales durante el último ciclo solar, causadas, entre otras cosas, por las acciones humanas.

Aunque se están produciendo cambios importantes a nivel local, esto podría evitar catástrofes importantes, que es lo que esperamos. Aunque la tierra se beneficia de protección celeste, sin embargo, se pueden prever muchos cambios (¿sobre todo costeros?) provocando un trastorno total en la organización de la vida actual. Por lo tanto, se aconseja tomar precauciones aunque estos cambios se evitarían a quienes se hubieran preparado lo suficiente para el espíritu de la unidad de la vida que se expresa en la fraternidad universal y la unión solidaria en las expresiones de la vida. De modo que la nueva tierra y su vida bajo un nuevo cielo estarán listas para entrar en el nuevo ciclo solar de la Era Dorada de abundancia y paz duradera.

de la gloria de oliva,

Símbolo colectivo de la humanidad

Notas:

- En los años 1980 no se hablaba todavía del calentamiento climático. Sin embargo, como jardinero, notaba  señales en la naturaleza al mismo tiempo que investigaba nuestro entorno cósmico.
Hay indicaciones de que las causas del calentamiento del planeta, que se han filtrado y divulgado oficialmente, no son del todo completas y exactas y deben inscribirse en un contexto que va más allá de nuestro planeta.  La opinión de una mayoría no está garantizada por ninguna verdad, entre otros científico.

- Existen indicaciones concretas de cambios importantes en el eje de la tierra en el pasado que la ciencia parece ignorar.

Aqui la representación de la constelación de León (esfinge) en el templo de Denderah  (http://egyptolog.chez.com/lion.html)                                                                             Se encuentran leones opuestos con el sol entre sí bajo el eje portador de una báscula.                                                       En un artículo anterior mostramos la oposición oeste de la cadireta (el león) en las montañés de Montserrat  hacia la posición este de la esfinge (león) de Gizeh...) en Egipto.

 - También hemos sentido desde 1989 la posible desintegración de la luna (3 lunas) (con migas que caerán como estrellas hacia la tierra (Apocalipsis). Los gases y las líneas de rotura encontradas en la luna podrían proporcionar pistas.

- El paso por el túnel de oscuridad o de perturbación mayor, podría tener  el efecto del movimiento de un eclipse solar prolongado.