Este es el resultado de un primer estudio de síntesis sobre la posible evolución de los sistemas democráticos hacia la democracia participativa sobre la base de lo que existe. Esta es una tendencia que requiere un tiempo más o menos largo para verla confirmada.
Hemos desarrollado un sistema que aplica las leyes fundamentales de la manifestación de la energía basada en el triángulo. La energía tiene una dimensión trinitaria en su manifestación, pero en realidad forma un acuerdo cuádruple con el fin de que se manifiesta. Así nos encontramos con las cuatro constantes o vivos del universo, reconocidos por la ciencia: la fuerza involutiva (o energía de la voluntad), la fuerza revolutiva (o la energía del amor), la fuerza evolutiva (o energía de la inteligencia activa) y la fuerza real (o la fuerza de la armonía del corazón). Estas constantes son interactivas y participativas, la una en la otra.
La política debe ser un holograma de estas leyes para que sea en armonía con su entorno. La democracia participativa va en este sentido. Vamos a ver dónde nos lleva y con qué consecuencias para el sistema actual.
1. La fuerza involutiva: es el principio de la renovación constante de la energía que determina la evolución de las circunstancias de la manifestación. La necesidad de renovación es necesaria para el mantenimiento de la manifestación y está impulsado por el principio de la igualación de la energía para mantener la armonía del conjunto. El principio de la igualdad es la base de la manifestación de energía en formas. Cualquier forma pide un retorno a las fuentes.
En el sistema democrático la fuerza involutiva está representada por la base popular que es la razón de ser de cualquier sistema político. Está evolucionando según los cambios de las condiciones de vida. En ella es el nuevo impulso y es ella quien evoca la necesidad de un cambio. La fuerza de la base representa el principio de la perfección de la vida individual en la comunidad sobre el principio de igualdad de la voluntad que es al origen de toda energía.
En el contexto actual es aquí donde se necesitan más cambios debido a un cambio en el pensamiento de los seres humanos en términos de su responsabilidad. Se abre más a lo colectivo, la necesidad de la interactividad y al unión en grupos. Esta necesidad se hace aún más urgente que la supervivencia y el mantenimiento de la sociedad a convertirse en una amenaza para unos pocos privilegiados. El sistema actual arriesga por el número, la población está creciendo demasiado rápido, a perder el control de la base que Marx llamaba el proletariado. Esto se ve acentuado por un sistema que está constantemente estimulada por intereses particráticos que separan a sus dirigentes de la base que, aunque la base a menudo ignorante, vuelve menos y menos felices. El ideal de una falsa libertad individualista se proyecta. Se alimenta una dependencia a necesidades artificiales que desvían la atención del potencial del poder colectivo de la base. Por temor a que el potencial, crece día a día en número, conduce inevitablemente a un mayor control, represión y manipulación. El resultado es, inevitablemente, la explosión del sistema, a menos que se le da la base de que ellos realmente necesitan.
1 1. La necesidad de información y la necesidad de educación política
La situación: Nuestra información es a menudo el resultado de las interpretaciones en una visión a veces más al derecho, a veces más a la izquierda. Por lo general son filtradas y transformadas para aumentar o disminuir las tendencias de los intereses que sirven. No serían la mayoría de las agencias de prensa censuradas en esto sentido, a pesar de que nos quiere hacer creer lo contrario? (Francia ocupa el puesto 44 del mundo). La reacción es natural e inevitable, gracias a la Internet. Ha creado redes paralelas, que no son necesariamente todo confiables. Ya que esta comprensible la tendencia política para tratar de controlar este sector incontrolable.
El camino de la solución: Necesitamos organizaciones de síntesis que esclarecen la verdad y la falsedad. También resulta necesario un enfrentamiento con la base para que las informaciones se interpreten correctamente. Aparte de la organización profesional en el mundo de la prensa, necesitamos foros que se están moviendo hacia un carácter más formal y popular.
La política no tiene estabilidad sin que su base tenga más sustancia. Se puede obtener sólo a través de estructuras reconocidas que informan sobre los aspectos vitales de la vida política para educar y capacitar a su responsabilidad política sin la cual no pueden participar. En este sentido hay la necesidad de foros populares. Se debe permitir la comunicación de la información necesaria para formar una visión de síntesis sobre la sociedad más allá de los intereses particulares o de visiones políticas particulares. Esto implica la colaboración de moderadores formados en esta dirección. Estos foros pueden existir en varios niveles (local, regional, nacional y europeo) y en varias áreas (desarrollo de las estructuras políticas, las relaciones sociales (comunicación, seguridad), económicos, la organización profesional, la ciencia, la salud y la aplicación de los valores humanos). La importancia de los foros es la interactividad que revela cómo somos capaces de evolucionar y que indica dónde están los bloqueos. Los bloques se mostrarán en qué nivel la estructura del Estado con sus leyes, jurisdicción y administración será respetada, eficiente y útil.
La organización de estos foros puede ser múltiple y pide una gran flexibilidad. Creemos en foros “oficializados” a través de Internet. Ofrecen la posibilidad de la continuidad, repetición y replay. Al mismo tiempo que se pueden conectar con la vida concreta en reuniones públicas, permitan un contacto más directo entre los ciudadanos y también con los elegidos. En efecto, debemos dar más sentido realista y veraz a la vida política. Es a la base que la organización de la vida política se experimenta, por ejemplo a través de sus leyes. Pero también es a la base que cambian las condiciones y la necesidad de cambios de esta organización y de sus leyes. El desequilibrio entre las fuerzas quiénes regulan esta organización es tal que por ejemplo Francia tiene el cementerio lo más grande en Europa de las leyes que no se aplican.
2. La necesidad de ejercer el poder político de una manera más interactiva:
La situación: el poder democrático civil ya existe en la ilusión de elegir personas que pretenden resolver todo en lugar de los votantes. La sucesión por alternancia y la repetición de los mismos problemas no sólo demuestran lo contrario, sino también una pérdida innecesaria de los esfuerzos que llevan a muchas decepciones.
Una de las razones es que los partidos políticos no juegan su papel como intermediarios o fuerzas canalizadores de las fuerzas que viven en la base. Otra razón es la falta de visión global en la política que condujo a tendencias muy divergentes provocando una fragmentación de los partidos en fracciones más y más divergentes y extremas. Por último, es también las ambiciones demasiado personales de sus líderes que quieren ganar el poder, aunque para disgusto de los otros, con métodos que a menudo son incompatibles con el espíritu democrático. El desinterés creciente de la base para similar tendencia es totalmente lógico. Esto no quiere decir que es bastante ignorante y no le interesa políticamente. Lo curioso es que los políticos se olvidan de que tienen el poder gracias a los votantes. La consulta de la base es tanto más una farsa que una realidad que afecta directamente al ciudadano. Así que hay una profunda separación entre la base y los elegidos que sólo se alcanza en tiempo de elecciones. Y las se falsean entonces puesto que sirven a menudo como medio de castigo y de despido, y no como la mejor solución.
El camino de la solución: La elección no puede dar como consecuencia que la base da su responsabilidad política completamente a unos pocos elegidos que representan necesariamente tendencias de división quiénes corresponden cada vez menos a los cambios del pensamiento en la base. Hay cada vez más necesidad de poder elegir sus representantes que resultan directamente de la base fuera de los partidos políticos que mantienen el sistema de división. Ya podemos imaginar candidatos independientes que emanan de los foros populares y merecen la aprobación concreta y directa. Estará en todo caso, el camino indicado para la elección del jefe del Estado quién, como mediador y representante de todos y representante del respeto a los poderes, debe ser neutral y libre de cualquiera de los partidos.
Un segundo aspecto es el del control o de la rectificación del poder establecido: en lugar de tener que demostrar en las calles hasta la caída de muertos, la base debe tener la oportunidad de expresar su voluntad en asuntos importantes. El desarrollo de foros, una vez provistos de medios técnicos automatizados, deben ser capaces de hacer la consulta fácil y económica por las autoridades públicas para aplicar directamente la visión de la población, ya sea por votación o por una consulta. Esta camino también será una oportunidad si ha caso para mostrar el desacuerdo con la base con el poder.
En el contexto actual, es probable que esto se entienda como una amenaza a la estabilidad del poder que ahora puede darse el lujo de sacar provecho de sus mandatos. Todavía hay que considerar que la sociedad está cambiando profundamente, y que los ciudadanos no tienen otra opción para resolver sus problemas si no quieren ser dominados por leyes más restrictivas y represivas quiénes implican hacer de ellos marionetas dóciles. El aprendizaje de una responsabilidad política real, no parece fácil y probablemente requerirá tiempo para adaptar para la educación. Pero parece la única solución para todos los males de nuestra sociedad, cada vez más ampliando la brecha entre una minoría privilegiada y la masa manipulada: la congestión en los tribunales y de las normas administrativas, las crisis repetitivas, la violencia, el desequilibrio en el mercado y en el tiempo de trabajo, el crecimiento y consumo injustificados, gastos no justificados en el conjunto de la necesidades reales de la sociedad, la aplicación de nuevas técnicas más allá de medida…”.
2. La fuerza revolutiva: el mantenimiento de la energía manifestada estructurada requiere un cambio constante por la energía renovada por su integración y armonización. Es el principio de la liberación de la energía vieja por la reorientación para permitir un más gran equilibrio y perfección siguiendo la evolución de toda la manifestación.
En el plano político es la renovación de las leyes, de los elegidos y del sistema administrativo, sino también la creación de nuevos elementos y la abolición de lo que se ha superado. Todo esto es demasiado rígido y dirigido por intereses particulares. Esta también de una importancia vital para el sistema democrático que los elegidos representan realmente lo que vive en la base, incluyendo la necesidad de la representación proporcional y una participación proporcional en las decisiones. El principio de la mayoría es sin duda un paso en el desarrollo de la conciencia humana, pero también es un principio que mantiene la exclusividad y la división. La tendencia debería ser la creación de un consenso y de favorecer mayorías más importantes según el caso. El progreso de la conciencia colectiva cambiara por completo estos datos en el futuro.
Para ser desarrollado.
3. La fuerza de evolutiva: la energía necesita expresarse indicando la dirección general. Es el principio de la valoración del conjunto. Esto provoca tensiones en caso de resistencias o puede hacerse de manera graciosa, sin causar problemas.
La valoración de la organización del Estado es fortalecer el principio de la fraternidad. Es a través del poder judicial sea de manera contenciosa, sea de manera respetuosa. Tomamos nota de que este poder está muy lejos de la base.
Para desarrollar.
4. La fuerza real de la unión solidaria: la energía recibida, expresada y estructurada requiere un contexto que permita el reconocimiento de una armonía dinámica o un acuerdo entre las distintas fuerzas mencionadas anteriormente. Esta fuerza está conectada a las otras fuerzas como elemento de solidaridad, pero al mismo tiempo tiene una dimensión superior puesto que da un sentido superior al conjunto: es el vínculo interactivo, al mismo tiempo libre y neutral sin cual no hay verdadera unión. Esta fuerza es real en el sentido verdadero y real, dando vueltas como una rueda.
Este principio es al nivel política el poder respetuoso quién es en la mayoría de los sistemas modernos demasiado vago y se mezclan con los poderes legislativo, ejecutivo y judicial. Esto refleja la falta de visión del conjunto quién se basa en un contrato ficticio: el de una mayoría cambiante. El poder respetuoso es el poder de la mediación, de la comunicación de la visión global, de la dinamización y de la confirmación del orden. Estos son elementos que están empezando a pedir nuestra atención, pero están todavía en su primera infancia.
Para ser desarrollado.
Otras ideas se pueden consultar: La evolución de la idea democrática
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